¡Oh, el mundo gira!

 

 

DISCURS.O.S. por Melguencio Melchavas
Número 31
08-06-99
¿Queríais aniquilarme?
Muchos de los que os preciáis de demócratas, de defensores de las libertades ¡ja!, de limpios y pulcros ciudadanos que votáis y cumplís con vuestros deberes ¡ja!, que sólo defraudáis a hacienda lo mismo que los demás, que sólo sois aupados a puestos de mayor responsabilidad en la empresa por vuestros amigos (qué gran cosa, la amistad), que sólo mataríais en defensa propia... me queríais matar. Estoy muy enfermo por vuestra culpa, y a punto he estado de morir, pero no conseguiréis que desaparezca. Melguencio Melchavas es un símbolo. Melguencio Melchavas es la encarnación de la Libertad con mayúsculas; y es imposible deshacerse de un concepto universal así como así. Desde esta humilde tribuna seguiremos denunciando todo lo denunciable, intentaremos hacer la sociedad algo más respirable, y procederemos a convertir en palabras la rabia del pueblo allí donde éste lo necesite. Cuando en este podrido mundo, el mismo canalla asesino que (siguiendo órdenes de la CIA) entrenaba a la contra nicaragüense, con el único objetivo de que en ese pobre y castigado país no triunfara la revolución, es hoy el que entrena a los "guerrilleros" kosovares, todo encaja de nuevo. La pretensión de seguir mandando en el universo hace que los Estados Unidos se comporten en Europa como en Latinoamérica: sus perros de presa entrenan a pobres ilusos para establecer su poder allí donde flaquea. La Unión Europea ha muerto. Viva la Unión Europea. Y los pollos envenenados, las vacas envenenadas, los telediarios envenenados, son la nueva bandera envenenada de este continente, envenenado por la presencia omnipotente del gendarme de Occidente. El mismo payaso que "dirige" la OTAN, acaba de ser elegido ministro de exteriores de la Unión Europea. Las relaciones de Europa con los demás países del mundo son encomendadas al mismísimo representante de USA en Europa. Y veremos cosas más absurdas. Y desde aquí las denunciaremos. Poco a poco, los que nos querían aniquilar se irán disolviendo en el ácido de sus propias entrañas hediondas. "El enemigo parpadea y está nervioso".
 

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