DE LA VELLEZA Y HELARTE

(para Isabel Soria, azote de especuladores)

por Antonio Tausiet

www.tausiet.com

 

 

Quizás si el asombro que provoca la belleza

desencadenara un tiritar en las entrañas

de los promotores inmobiliarios,

el hielo del paisaje urbano quemaría mucho menos.

 

Quizás si los vestigios del pasado con su aura melancólica

recibiesen un minúsculo porcentaje de ternura,

el intenso frío de su muerte lenta

no sería equiparable al de las calculadoras de los concejales.

 

Pero piedras, memoria, arte, civilización y convivencia

con sus cargas de belleza, asombro y melancolía

permanecen hibernadas en la fría cámara que guarda la sensibilidad

(única manifestación humana de inteligencia).

 

Quizás si un clarinetista callejero

sostuviese entre las manos estas frases

(a la sombra de algún viejo caserón abandonado)

sus dedos se congelasen de paradoja:

el arte en la calle es helarte en la calle.

 

Antonio Tausiet, 14 de julio de 2000, día de la República Francesa.