ESPAÑA = ESPECULACIÓN

Por Antonio Tausiet

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España es el país ganador en el último sondeo de precios de los pisos: ha sufrido el incremento más alto en los 13 países más desarrollados del mundo (España, Irlanda, Gran Bretaña, Holanda, Bélgica, Estados Unidos, Francia, Japón, Canadá, Italia, Australia, Suecia y Alemania), según un estudio realizado por la prestigiosa revista británica The Economist.

Descontada la inflación, comprar una casa en España es un 124% más caro que hace 21 años, mientras que el incremento medio en los 13 países analizados ha sido del 19%.

Las causas de este estrepitoso fracaso social en política de vivienda en España hay que buscarlas en el continuo mercadeo del suelo que hacen las Administraciones públicas, tanto el Estado como los Ayuntamientos. Mientras, las Comunidades Autónomas, que tienen transferidas las competencias al respecto, se inhiben ante el problema.

Se ha ido cayendo en un hondo y oscuro pozo en cuyo fondo brilla el metal de los euro-ladrillos que financian a los Ayuntamientos, y, según todos los indicios, a sus responsables.

Consultado un responsable del Partido Popular al respecto, ha manifestado que la situación es correcta y saludable, porque es el mercado el que decide el precio final de los pisos en venta. Mentira gorda, ya que la causa principal es la especulación pública, alentada por el propio Partido Popular. No en vano, un reciente estudio del sindicato Comisiones Obreras revela que desde 1996, año de la llegada al poder de José María Aznar, el precio de la vivienda es un 60% más alto.

Los datos son objetivos: la España del PP es el país con los pisos más caros, la subida se ha producido predominantemente desde que los conservadores llegaron al gobierno, y los responsables directos son los políticos en el poder, que dan su bendición sin rubor a esta horrorosa situación. Conclusión definitiva: hay que ir a por ellos. Echarlos, denunciarlos, librarnos de su presencia de una vez por todas.